En todos los sentidos. Resulta que la maldita crisis se nos va a llevar a todos por delante. Estoy empezando a notar sus efectos en mis propias carnes, sí, porque las preocupaciones…. han hecho que adelgace esos dos kilos extra que se habían aposentado en mis caderas desde que di a luz a Número 2!!! Efecto positivo único y superficial para una época difícil como pocas. Más cantidad de trabajo, más preocupaciones, menos satisfacciones. Más planteamientos a largo plazo, puaj.
En realidad lo de las curvas es porque en mis últimas incursiones estoy encontrándome con un cambio de tendencia: montones de camisetas que vuelven a ser cortas y ajustadas. Incluso dejando el ombliguito al aire. Ay por Dios… A las que, como yo, el cambio de aires a camisetas largas y amplias, vestidos que ocultan todo y cortes imperio nos ha pillado en la transición entre la veintena y la treintena, entre la “juventud-yo-puedo-con-todo” y el “ups-va-a-resultar-que-YA-se-me-van-cayendo-las-tetas-menos-mal-que-la-ropa-lo-camufla”, esta noticia no es precisamente buena. Y por mucho que me haya deshecho de esos dos kilos, no me veo vestida como Britney Spears en sus comienzos.
Bien es cierto que la tendencia empieza por las líneas jóvenes de las grandes marcas, destinadas a casi niñas. Las que nos movemos en otras líneas todavía tendremos unos ¿meses? de margen. Pero de verdad, ¡no lo asumo! Nunca me vi muy favorecida con el modelo madrileño de 1994-1995, cuando llegué para estudiar la carrera: pantalón pitillo alto de cintura marca Cimarrón + camiseta blanca ombligueril. De hecho no lo practiqué, me sentaba fatal.
Y lo peor es que la inversión en vestiditos y tops amplios vino aparejada a un desenfreno arrollador de “regalo todas las minicamisetas y minijerseys que tengo en el armario porque ya no se llevan”. Así que dentro de nada tocará darle la vuelta otra vez al armario. O quizá no, y me quede permanentemente en el look de 2008, que me sienta mejor, y a ver si de paso ahorramos algo, de una vez.
En realidad lo de las curvas es porque en mis últimas incursiones estoy encontrándome con un cambio de tendencia: montones de camisetas que vuelven a ser cortas y ajustadas. Incluso dejando el ombliguito al aire. Ay por Dios… A las que, como yo, el cambio de aires a camisetas largas y amplias, vestidos que ocultan todo y cortes imperio nos ha pillado en la transición entre la veintena y la treintena, entre la “juventud-yo-puedo-con-todo” y el “ups-va-a-resultar-que-YA-se-me-van-cayendo-las-tetas-menos-mal-que-la-ropa-lo-camufla”, esta noticia no es precisamente buena. Y por mucho que me haya deshecho de esos dos kilos, no me veo vestida como Britney Spears en sus comienzos.
Bien es cierto que la tendencia empieza por las líneas jóvenes de las grandes marcas, destinadas a casi niñas. Las que nos movemos en otras líneas todavía tendremos unos ¿meses? de margen. Pero de verdad, ¡no lo asumo! Nunca me vi muy favorecida con el modelo madrileño de 1994-1995, cuando llegué para estudiar la carrera: pantalón pitillo alto de cintura marca Cimarrón + camiseta blanca ombligueril. De hecho no lo practiqué, me sentaba fatal.
Y lo peor es que la inversión en vestiditos y tops amplios vino aparejada a un desenfreno arrollador de “regalo todas las minicamisetas y minijerseys que tengo en el armario porque ya no se llevan”. Así que dentro de nada tocará darle la vuelta otra vez al armario. O quizá no, y me quede permanentemente en el look de 2008, que me sienta mejor, y a ver si de paso ahorramos algo, de una vez.
Por cierto, buscando fotos en google images para ilustrar la tendencia, bajo las palabras "camisetas cortas" pensaba encontrar alguna horterada de los noventa, y he comprobado cuál ha sido mi error (y horror) al pensar que el cambio iría poco a poco al ver que en Trendencias aparecía la foto que está al principio de esta entrada. Si ellos lo dicen, la epidemia se va a propagar más rápido de lo esperado!!!
3 comentarios:
gracias por los animos!
en cuanto a las camisetas por encima del ombligo solo tengo que decir NOOOOOOOOOOOOOOOOOOO!!!
aunque soy joven y sin niños siempre he tenido tripita asique desterrado de mi armario y de mi imaginacion este look,
creo que para consolarme me voy a comer un helado..
gracias por tu opinion sobre mis diademitas, la intencion era ponerlas a la venta, asi que espero que tengan buena aceptacion!
Oh!!! Con lo que me gustaba la moda 2008! He de decir que fui de las de Cimarrón aunque nunca de camiseta ombliguera, pero definitivamente, despues de haber tenido mis particulares número 1 y número 2, descarto absolutamente cualquie tendencia que deje tripa-ombligo al aire y/o que sea ceñida.
Arrggg
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