miércoles, 28 de enero de 2009

DESBOCADA

Lo de la superwoman empieza a ser un tópico, lo sé. Pero hay veces que, objetivamente, no puedo con todo. Este mes es el claro ejemplo. La verdad es que, a los factores habituales de mi rutina se han unido una serie de cuestiones extraordinarias que están haciendo que la cuesta de enero sea algo más que una cuestión de dinero!!!

Por un lado, eso de ser una trabajadora y ser madre de familia os lo sabéis de memoria, bien porque lo vivís en vuestras propias carnes o bien porque conocéis a alguien que os da la barrila con el tema. Lo mismo respecto a la falta de tiempo para una misma, llevar la casa con más o menos éxito, hacer la compra, ser la gran amiga para tus amigos, y una compañera ejemplar para tu señor esposo o equivalente.



Bueno, pues a ese mix cotidiano se han sumado una serie de factores que, con mayor o menor importancia, se complementan a la perfección para hacerme la puñeta. Así que ando DES: descontrolada, desbocada, desquiciada, descentrada y fundamentalmente desplanificada….

Mi Propio ha cambiado de ocupación y a partir de ahora tendrá que viajar bastante. Este mes se ha pasado varios días fuera. Eso supone una dosis extra de trabajo y de paciencia (virtud que no es precisamente mi fuerte) con Número 1 y Número 2, particularmente por las mañanas. ¡Que espanto es la hora del desayuno!!! Llego a trabajar agotada y sólo son las 9.30. Factor Carga.
Las rebajas este año me parecen una mierda. Me escabullo de la oficina a la hora de comer para ir a una tienda cada día (no da tiempo a más). Y casi nunca encuentro nada, y cuando lo encuentro me entra una extraña responsabilidad porque en el fondo es todo un capricho. Así que después de probarme, cargar con las prendas durante un rato por toda la tienda, y hacer unos minutos de cola, abandono todo en un rincón (bien arrugado, claro) y me marcho enfadada. O llorando. O gritando!!! Factor Desilusión.

Tengo un permanente “Bad Hair Day”. Se me cayó la mitad de la cabellera después de nacer Número 2, y ahora estoy en el momento repoblación capilar más perezoso que existe. No tengo pelo, sino nubes de algodón negro pegadas a la cabeza. Eso sin hablar del flequillo falso, que no es más que pelo nuevo pero parece que me ha dado por cortarme cuatro mechones en plan ochentero -y no crece o parece no crecer-. Factor Desesperación.

Y para rematar, durante la última semana y media he tenido un dolor de espalda de muerte. Tanto, que tuve que urgencias para que me empastillaran. Poco a poco voy mejorando, pero durante unos días parecía el jorobado de NotreDame cada vez que me levantaba de la silla, hasta que deambulaba un poco para recuperar postura. Además de la miseria que provocan estos achaques de vejez prematura, he tenido que cargar con risas indisimuladas (“Si es que pareces la Duquesa de Alba”), y todo tipo de diagnósticos además de consejos (“Ya te puedes cuidar, eh maja, y nada de coger a los niños”). Factor Estoy Viejaaaaaaa.
En fin, que la vida hay que tomarla con humor y qué mejor que un foro abierto para ello. Así me ahorro la terapia y supero este fatídico mes.

Para terminar, hallazgo: cinturón de Blanco por 9.99 euros, lo vi en Elle y me encantó, así que fui a una de las tiendas y lo encontré! Es anchísimo y me encanta para encima de un abrigo o de una chaqueta. Y no es de rebajas!!!! Os pongo el link a la sección "prensa" de la web de Blanco donde aparece que es lo único que he podido hacer para enseñároslo. Soy lo peor con las cosas de la técnica...

sábado, 17 de enero de 2009

La pandilla

No sé si alguna vez he comentado que en el sitio al que vamos a tomar café todas las mañanas los compañeros de la oficina coincidimos siempre con un grupo de… no sé como llamarlas. Primero las defino y luego vemos cómo encuadrarlas. El grupo de féminas en cuestión, compuesto de un núcleo duro de tres de ellas que son fijas y otras dos o tres que aparecen de manera más intermitente, andará por los treinta y pocos. Son razonablemente monas, madres de familia (no preguntéis por qué lo sé, no sabría contestaros, pero lo sé), visten ideales y de marca, y se encuentran aparentemente desocupadas. Porque parece que no tienen nada especial que hacer después de llevar a los niños al cole y antes de ir a buscarlos a las 5, y se permiten el lujo de tomarse un cafetito entre amigas en plan tertulia a las 10 de la mañana para, después de ese momento, que de por sí es taaaan agradable, soltar frases del tipo:

“Todavía no he ido a conocer Tiffany’s; ¿quién me acompaña?”

O esta otra:

“Creo que hoy me voy a dar una vuelta por la calle del Pez a conocer la tienda... [no oí el nombre, lo siento]”.

Como veis, provocan mi más corrosiva envidia. Es que ese momento coincide con el fin de mi pausa de 15 minutos matutina, cuando vuelvo a una oficina que en ese momento se me antoja más gris que nunca. Os aseguro que me encanta trabajar y que me siento muy orgullosa de ello. Siempre… Menos en ese momento del día.

Asumo que aún hoy en día hay mujeres que, voluntariamente (y estoy hay que recalcarlo, ya que hay gente que desea trabajar y por distintas circunstancias no puede hacerlo), pueden permitirse el lujo de llevar ese estilo de vida, no me entra en la cabeza que en un mismo grupo de amigas haya tantas. ¿O es que se han conocido en su deambular de tienda en tienda y han formado pandilla?

Volviendo a la definición, lo siento pero no se me ocurre ninguna. Mujeres se me hace muy duro. El término mujer me recuerda a una hembra, ancha de caderas, que trabaja duro en el medio rural. Chicas… Pues tampoco son precisamente una pandilla de universitarias despreocupadas. Y calificarlas como Señoras…. Demasiado. No lo sé, pero, aunque sólo fuera por unos mesecitos, me encantaría cambiarme de mesa a la hora del desayuno, y ser una de ellas.

jueves, 8 de enero de 2009

LOS DISEÑOS DE SOFIA COPPOLA




No es la primera que Sofía Coppola coquetea con el mundo de la moda, ya que anteriormente fue becaria de Chanel y musa y amiga de Marc Jacobs, y en 1998, junto a sus amigas Stephanie Hayman y Kim Gordon, líder del grupo Sonic Youth, montó Milk Fed, marca de ropa que vendía sobre todo en Japón y además ha realizado anuncios para Dior. En mi opinión ella posee un estilo fantástico vistiendo, sobrio y elegante al mismo tiempo.

Pues bien, ahora Sofía colabora con la firma Louis Vuitton, creando sus propios diseños, la colección cuenta con bolsos de gran tamaño, maxibolsos sencillos, prácticos, cómodos y elegantes, así como unos fantásticos sobre de mano, muy práctico para la noche, en donde metes el móvil, las llaves y la tarjeta de crédito, muy chick y muy comodo, e incluso ha diseñado sandalias retro de cuña inspiradas en los años 70, la colección se llama SC BAG, iniciales de la directora, en definitiva ha creado una colección en donde puedan usar cómodamente toda la noche pero al mismo tiempo no pierdan la elegancia. Aunque la colección se ha presentado ya en Tokio no estará en la tiendas hasta marzo, no sería mal regalo para mi cumpleaños¡¡